Quedan pocas horas para que el año toque a su fin y la comisaría del distrito 13, una de las más antiguas de Detroit, está a punto de cerrar. Muchas carreteras están cortadas debido a la fuerte nevada y sólo queda un puñado de policías encabezado por el sargento Jake Roenick, un buen oficial que no consigue olvidar una operación fallida que tuvo lugar la primavera pasada. Roenick y la vieja comisaría no están en su mejor momento. Este mismo día, el 31 de diciembre por la mañana, un policía de paisano intenta arrestar al mafioso Marion Bishop.